En medio de la tragedia desatada por el reciente accidente de tránsito en Suchitepéquez, Guatemala, el migrante cubano Bárbaro Alexander López Miranda, de 29 años, ha emergido como un símbolo de resiliencia y esperanza.
Tras sobrevivir al choque que cobró la vida de nueve cubanos y dos guatemaltecos, López Miranda está siendo atendido en el centro asistencial en Tiquisate, Escuintla.
El Instituto Guatemalteco de Migración ha desplegado esfuerzos para brindarle apoyo psicológico, reconociendo el estrés postraumático que enfrenta.
Además, se le aseguró que contará con respaldo para gestionar su situación migratoria una vez concluida su atención hospitalaria.
Se planea una intervención quirúrgica para implantarle una placa metálica debido a una fractura en uno de sus brazos.
Mientras se recupera, López Miranda ha mantenido contacto con su familia en La Habana, Cuba, recibiendo mensajes de solidaridad y garantías de apoyo humanitario.
Desde el día del accidente, el Instituto Guatemalteco de Migración está colaborando activamente en la investigación del suceso y en coordinación con el Ministerio de Relaciones Exteriores para facilitar el proceso de repatriación de las víctimas.
Este episodio trágico destaca la importancia de la cooperación internacional y la atención integral a los afectados en situaciones de emergencia migratoria.
Info: IGM
